La recuperación económica y deportiva, además de la rehabiliatción social, son las cuestiones claves a las que debe hacer frente el nuevo grupo inversor que está a punto de hacerse con las riendas del Real Zaragoza.
Tras el preacuerdo firmado el pasado viernes, los actuales propietarios confían en cerrar la negocación con Hacienda para establecer un calendario de pagos que garantice la entrada del capital azteca en la escuadra blanquilla.
La familia Lobato Blanco, con un modesto proyecto en el fútbol mexicano, el Club Deportivo Yahualica de Los Altos, de la tercera categoría, abandera la operación de compra de la entidad blanquilla. Mario Cardona López, presidente del club, ha explicado que en los próximos dos o tres días se quiere dejar cerrado el organigrama institucional y deportivo.
Sin duda, la situación económica es una cuestión fundamental a la que deben hacer frente los nuevos accionistas. Además, la construcción de un sólido proyecto que pueda devolver al Real Zaragoza cuanto antes a la Primera División.
Aunque tal vez por delante se encuentra la necesidad de recuperar a un zaragocismo dolido y muy afectado por la lamentable gestión llevada a cabo en el conjunto aragonés por parte de Agapito Iglesias y sus colaboradores en los últimos ocho años.
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